Codicia, Lujuria, Envidia, Mentiras…
¿Cuántas veces mamá dijo que había que ser bueno? No dejarse llevar por los pecados capitales que pueden hacernos ir al infierno, aún recuerdo su voz firme y dulce repitiéndomelo antes de ir a misa. Pero nadie escucha a mamá, a nadie le importa ir al infierno porque ni siquiera somos capaces de creer en ello; sólo creemos lo que vemos.
El hombre es un ser egoísta y codicioso; manipulador y chantajista capaz de hacer cualquier cosa con tal de tener dinero y poder, llegando a provocar guerras por un simple capricho ¿no me crees? Échale un vistazo a la historia, tantos hombres como mujeres han usado diferentes artimañas para conseguir su cometido. Todos han sido cortados con el mismo patrón.
Paris, la ciudad del amor… Permítanme reírme, por favor. ¿La ciudad del amor? No podía estar más lejos de la verdad, en esta ciudad de luces y aire romántico lo único que importa es la billetera que tienes; el poder se mide por la cantidad que hay en tus arcas, lamentándolo mucho no todos somos multimillonarios pero si inteligentes, y han tenido que sobrevivir a cualquier precio, incluso si eso significa vender tu propio cuerpo.
Debes ser rico y astuto sino simplemente eres un…
Esclavo del dinero.